Punto y... ¿final?

Cuando abrí este blog con la intención de mostraros mis conocimientos sobre el fútbol y mis ganas por vivir contándolo, no me imaginaba que pudiese cansarme algún día. Mantener un blog con regularidad es mucho trabajo para un adolescente en la edad el pavo -usease, yo- y creo qu es lo mejor que podía hacer. Es algo que ha dejado de motivarme. Sin saber ni cómo ni por qué, el fútbol ha ido dejando de tener importancia en mi vida. Algo que me parecía imprescindible hace apenas un año. No del todo. El Xerez sigue siendo mi mayor pasión -superando al Real Madrid, del que no estoy muy pendiente este año- y voy a verlo cada domingo. Pido perdón por no haber dado señales de vida desde aquel 25 de Agosto de 2008 en el que escribí mi último artículo. Digo adiós dando gracias a todos aquellos que mantuvieron la existencia de este blog durante un año y pico con sus visitas y comentarios. Gente como Andrés, Pablo, Javi, Christian o Moi, que me han ayudado a crecer y a saber expresarme mucho mejor. Me entra la nostalgia al ver todo el tiempo y el cariño que le he dedicado, pero la vida son ciclos y aquí se acaba uno en la mía. Creo que he intentado ser siempre honesto y decir lo que pienso sin tapujos. Quizás algún día decida retomarlo porque me vea con tiempo, ganas e ilusión. Lo mismo que tenía cuando lo creé. Si el Xerez asciende a primera, prometo un post para celebrarlo. Estamos ahí arriba y la ilusión no me la quita nadie.

Ahora tengo un blog más libre y menos serio, un blog sobre uno de mis ídolos fuera del ámbito futbolístico. Pepito el Caja, un humorista gaditano que cuenta los chistes por bulerías. Si os va, podéis pasaros. Al menos a conocer a este señor que tiene toda la gracia del mundo.

Gracias a todos los que habéis hecho que me sintiese periodista deportivo durante 16 meses, que no son pocos. Hasta siempre.